|
Tiempo aproximado de lectura: menos de un minuto. |
Tumbe: En algunos países latinoamericanos se le llama así al robo de recursos de una banda delincuencial a otra.
Don Pablo realmente apreciaba a esos muchachos, decía que le
recordaban a él mismo en sus comienzos.
Debo admitir que para mí Juan y Julio eran dos elementos con mucho
potencial, aprovechaban su condición de policías al máximo: robo, extorsión,
secuestro, intimidación, distribución, asesinato. Proveían todos los servicios
básicos. Desgraciadamente, a inicios de febrero del año pasado, quizá bajo un
ataque de ambición desmedida, comenzaron a dedicarse al tumbe de dinero y de droga,
y eso, señores, ¡es pasarse de la raya! No tuvimos más opción que decapitarlos para
luego enviar un paquete con sus cabezas a la comisaría. Dentro de cada boca
pusimos un par de billetes de un dólar; ustedes saben, nuestra firma registrada, ¡muy importante en
este tipo de notificaciones! Fue nuestra forma de recordarle a la policía de que hay que tener el mínimo de ética.